Mis Primeros Vinos

Hoy doy un paso adelante en este mundo fascinante del vino, con este blog quiero compartirles un poco de mis experiencias que tenga con los vinos pero sobre todo con los vinos mexicanos.
Estoy convencido de que en México cuando se quiere, las cosas se hacen perfectamente bien, y si en algo no tengo la menor duda de que está muy bien hecho es el vino mexicano.

Cabe mencionar que no soy ni sommelier, ni enólogo ni nada parecido a profesional del vino, simplemente soy un amante de esta bebida, que la disfruta desde el momento en que voy a buscar la botella, que se emociona cuando llega el momento de abrirla y que suspira cuando la respira por primera vez.


Sin embargo esta primer entrada no será para algún vino mexicano, mas bien si me lo permiten les platicaré como inició mi gusto por este elixir.


Fue hace aproximadamente unos 8 años cuando una prima celebraba sus 15 años, acá en México es una edad que se festeja a lo grande y bueno para no hacer el cuento largo en la fiesta se sirvió vino, Lambrusco lo recuerdo bien, ¿Por qué? jaja por que era "dulcecito" y la verdad, fue una buena elección entendiendo que la familia está acostumbrada a los destilados, principalmente el tequila, entonces ofrecerles un vino dulce fue un gran acierto y sí.. así empecé, creo como muchos, con un vino dulce.

Algunos días después de la fiesta quise volver a tomar el vino, llamé al anfitrión de la fiesta y le consulté por el vino que sirvió en la fiesta, me dijo que era Lambrusco y me fui al supermercado a buscarlo, ohhh sorpresa, no era como buscar un ron o un vodka, aquí había mínimo 50 botellas todas diferentes y entre en shock, ¿cuál me llevo? Leía en etiquetas de diferente diseño "Merlot", "Malbec", "Shyra", no sabía si era la marca del vino o que era, no sabía nada.. después de 30 minutos de confusión decidí llevarme la etiqueta que a mi parecer era la más llamativa. La verdad no recuerdo que vino era pero para mi escasa experiencia, mi segundo vino fue agradable, no era dulce, pero me gustó.

En ese momento decidí no volver hacer el ridículo conmigo mismo, la próxima vez sabría que diferencia había entre cada una de las botellas... hasta el día de hoy no se que diferencia hay exactamente entre cada una pero por lo menos ya tengo una idea de que esperar dependiendo la uva, la región, la cosecha, etc.

Aún me sigo tardando 30 minutos en escoger una botella pero ahora en ese tiempo imaginó y pienso en las mil experiencias que me puede dejar una u otra botella...

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